Zombieland fue una película que, en su momento, marcó un antes y un después en el género de zombies. Pocas películas de este estilo se habían atrevido a usar la comedia como foco principal y menos lograron tener éxito, mientras que el grupo disfuncional de Tallahassee (Woody Harrelson), Columbus (Jesse Eisenberg), Wichita (Emma Stone) y Little Rock (Abigail Breslin) lograron cautivarnos en la pantalla. Ahora, con Zombieland: Tiro de Gracia, ¿lograron repetir la hazaña? Leamos este review al ritmo de una canción de la cinta:
La sinopsis oficial de Tiro de Gracia, tal como pudimos ver en los adelantos de la misma, nos dice que los cazadores de zombis Tallahassee, Columbus, Wichita y Little Rock abandonan los confines de la Casa Blanca para viajar a Graceland en Memphis, Tennessee. En el camino, se encuentran con otros guerreros post-apocalípticos y un grupo de sobrevivientes que encuentra refugio en una comuna. Los cazadores ahora deben confiar en su ingenio y armas más que nunca, ya que pronto se encuentran en una batalla implacable contra zombis más inteligentes, más rápidos y aparentemente indestructibles.
Esta secuela transcurre diez años después de la original y eso se ve muy bien plasmado en los actores. Stone y Eisenberg son mucho más carismáticos y sus actuaciones más limpias, mientras que en el caso de Harrelson, quien ya era un gran actor para la primera, regresa con más fuerza mostrándonos a un mucho mejor presonaje (si es que se puede mejorar a Tallahassee). Breslin no ha tenido, quizás, tanta fama como sus compañeros en pantalla, pero su esencia como la pequeña Little Rock sigue allí y muy buena parte de la trama gira en torno a ella.
Rosario Dawson (Nevada), Luke Wilson (Albuquerque) y Thomas Middleditch (Flagstaff) también nos muestran actuaciones brillantes y de personajes pintorescos que solo podrían existir en películas de este estilo, aunque la Madison de Zoey Deutch se roba buena parte del show.
La música de la película es increíblemente buena, con un intro acompañado por Metallica (igual que en su precuela) que nos pone a tono con lo que estamos por ver: una película de zombies fresca y diferente, enfocada más en los sobrevivientes que en las criaturas en sí. Algo brillante de la cinta es que sus efectos especiales relucen, puesto que se trata de efectos prácticos, maquillaje, bolsas de sangre y muy poco CGI excepto para escenas puntuales, lo que hace más fácil disfrutar de las escenas de acción. Una particularmente buena es un plano secuencia bastante largo que nos muestra lo importante de saber improvisar cuando luchamos con zombis en espacios reducidos.
Zombieland: Tiro de Gracia logra algo que muy pocas secuelas consiguen: ser una muy buena película, que se apega a la primera y, además, llena de frescura en un género al que Hollywood ya esta comenzando a olvidar, quizás para bien, quizás para mal.
A Zombieland: Tiro de Gracia le damos 8.5/10 reglas.
