El miedo de cualquier persona que ve una película y le gusta, es descubrir que se le anunció una secuela. Muchas historias debieron haber muerto con su primera parte pero otras, con una buena dirección, atención al detalle y respeto por su original, pueden contar con la bendición de una segunda parte que valga la pena. Feliz día de tu Muerte 2 lo consigue, haciendo algo que pocos directores han hecho para darle un giro fresco a su franquicia: un salto de género.

Y esto es precisamente lo que hace esta secuela: Donde la primera fue una película de comedia y terror sobre una chica que se queda atrapada en un bucle diario cuando es asesinada, la segunda parte es una comedia de ciencia ficción que ahonda un poco más en el misterio de la primera y, tras recordarnos las bases del mismo, se va por otro camino.

En Feliz Día de tu Muerte 2 volvemos a ver a Tree (Jessica Rothe) justo después de romper con el bucle temporal de la primera entrega. La chica es, ahora, feliz con Carter (Israel Broussard) y, como suele pasar, es interrumpida por Ryan (Phi Vu), quien luego escapa a su laboratorio para continuar con la investigación de su proyecto de ciencias junto a sus compañeros, Samar Ghosh (Suraj Sharma) y Dre Morgan (Sarah Yarkin): un dispositivo cuántico (apodado Sissy) que, según Ryan, puede enfriar un punto en específico por debajo del cero absoluto, consiguiendo así ralentizar el espacio tiempo en dicho punto. Como suele ocurrir con las cosas cuánticas desarrolladas por alumnos de universidad que se alimentan sólo de churros, las cosas salen mal, y Tree es atrapada nuevamente en el bucle del que había logrado escapar, y con un nuevo asesino tras su cabeza.

La película, a nivel de narrativa, hace un buen trabajo en explicarnos por qué ocurrieron los eventos de la primera y qué ocurrirán en la segunda. Como con cualquier cosa que trabaje con el Jeremy Bearamy de los viajes en el tiempo, hay mucha pseudociencia involucrada pero, hey, ver las nuevas formas en las que Tree muere siempre es reconfortante. Si bien en la primera vimos un buen desarrollo de su personaje gracias a Carter y su capacidad de lidiar con la muerte de su madre, el nuevo bucle en el que Tree queda atrapada presenta nuevos retos que la obligarán a replantearse lo que tiene apenas un par de días de haber aprendido. El desarrollo de personaje, para ella, continúa, y ocurre de una buena manera.

Las actuaciones son como las de cualquier comedia con adolescentes (o actores adultos actuando como adolescentes). Jessica Rothe es quien más destaca por su interpretación dramática mientras que el resto sencillamente va por ahí haciendo lo suyo y siendo el alivio cómico de la trama. El foco en Phi Vu esta vez es mayor que en la primera y se nota que el joven tiene talento para la comedia, y el dinamismo entre Sharma y Yarking es lo suficientemente bueno como para sacar algunas risas. Broussard, una vez más, actúa como ancla para Tree, siendo su conciencia más que su novio, y el actor definitivamente recuerda cómo llevar al personaje.

La música de la película destaca poco, aunque con varios guiños referenciales a películas como Volver al Futuro que la hacen aun más interesante para quienes conocen de aquella saga de ciencia ficción. Es un punto un poco más flaco que el de su predecesora y se deja ver a lo largo de la película, donde si bien la atención al detalle es importante, hace falta un apoyo auditivo que la complemente mejor.

A Feliz Día de tu Muerte 2 le damos 8/10 bucles temporales.