Antes de empezar con este review, vamos a poner el ambiente musical adecuado.

Gracias, Cat Stevens.

Guardianes de la Galaxia vol. 2 vuelve a llevarnos al espacio, muy, muy lejos de la Tierra y los Vengadores, junto al grupo de ¿héroes? conformado por Star-Lord, Gamora, Rocket, Drax y el bebé Groot. Ya son un equipo oficial y reconocido, luego de haber salvado la galaxia cuatro años atrás, pero ser oficiales y reconocidos no implica que hayan cambiado sus actitudes. Las peleas y la falta de comunicación entre ellos siguen a la orden del día, y los Guardianes no han cambiado tanto desde la primera entrega, y tampoco lo ha hecho el corazón de la película: la familia.

Las familias son difíciles, complicadas y en ocasiones quieres ahorcarlos. Pero también está esa otra familia, la que eliges y construyes a tu alrededor con personas que no necesariamente son como tú, y que sin embargo quieres tenerlos cerca porque… porque sí, porque te hacen mejor persona, porque te dan seguridad, porque se ríen de tus chistes y te tienen paciencia, y porque también son familia. ¿Y si tienes que decidir entre una y otra? Ah, pues ahí podrías tener un problema…

La película es más emocional en cierta forma que su predecesora y hay un par de momentos que te arrugan el corazón (y hay uno que involucra fuegos artificiales y hará llorar a cualquiera), aunque esto no implica que la acción o el humor que tanto caracterizan al Universo Cinemático de Marvel, y en especial a los Guardianes, esté en segundo plano. Bebé Groot es tan adorable como alguna vez podríamos haberlo imaginado, Drax… continúa siendo Drax (y citando -no sabemos si de forma intencional- a Lilo y Stitch y Gurren Lagann), y Rocket sigue siendo un presumido, malhumorado y talentoso panda de basurero, mientras que Gamora ha dejado atrás ese deseo de actuar en solitario, siendo definitivamente la que está más clara en el concepto de ser un «equipo», y Peter -como el imperfecto héroe que es- termina creciendo como persona a lo largo de la trama.

Se puede decir que Guardianes de la Galaxia vol. 2 es, en cierta forma, una repetición de la fórmula que funcionó tan bien en la primera, ¿pero por qué arreglar lo que no está roto? James Gunn conoce a estos personajes y definitivamente conoce lo que el público espera de ellos, y este rincón cósmico del MCU puede permitirse ciertas libertades que no funcionarían con los personajes que están anclados a la Tierra. Además, es evidente que los actores ya están mucho más cómodos en sus papeles, en especial Karen Gillan con Nebula, quien tiene más diálogo y agencia y nos revela más de su motivación, y el Yondu de Michael Rooker… quien fue mi personaje favorito de la película, y por mucho.

Los recién llegados también son adiciones interesantes. El más destacado es Ego, y si eres alguien que creció con las películas de acción de los 80s y principios de los 90s, siempre es agradable ver a Kurt Russell. La Ayesha de Elizabeth Debicki podría convertirse en una pieza importante del MCU (y una de las cinco escenas post-créditos confirma que estará involucrada en parte en el vol. 3), y la historia de la Mantis de Pom Klementieff apenas está comenzando. Sylvester Stallone interpreta a Stakar, y aunque no tuvimos ese reencuentro de Tango y Cash que tanto le habría gustado a mi corazón, su personaje podría fácilmente tener más presencia en futuras entregas de los Guardianes.

La música fue una parte vital de la primera entrega y eso se mantiene en esta secuela (de nuevo, gracias, Cat Stevens), incluso incorporando la letra de algunas canciones a los diálogos de los personajes o con «Guardians Inferno» sonando durante los créditos, con la participación de David Hasselhoff, quien tiene una aparición bastante especial en la película. Personalmente, me gustó más el Awesome Mix vol. 1, pero el vol. 2 funciona y ayuda a mantener ese ambiente de película de los 80s que es parte del sello de Guardianes.

Guardianes de la Galaxia vol. 2 tiene todos los elementos que hicieron a la primera parte lo que fue: música genial, personajes que rompen el molde del héroe estereotípico de Marvel, Groot, visuales espectaculares y coloridos, referencias para todos los gustos y acción espacial. No llega por completo al nivel de la primera, pero al considerar que es el acto intermedio de una trilogía, podemos perdonárselo, y esas cinco escenas post-créditos cierran unos cuantos agujeros en la trama, al mismo tiempo mostrando atisbos de lo que podría venir en la tercera parte.

No cualquiera puede salvar la galaxia, y mucho menos dos veces.

ModoGeeks le da a Guardianes de la Galaxia vol. 2 9,5/10 walkmans.