Google se destaca porque la mayoría de sus servicios actualmente se ofrecen en la nube. En particular, podemos nombrar servicios como Google Translate, la búsqueda por voz -mejor conocida como «Ok, Google«- e incluso, Inbox. Es bastante evidente que Google se afianza cada vez más en el aprendizaje de máquina (Machine Learning) y combinado con la lista bastante extensa de herramientas que se ofrecen desde la nube, la compañía espera llevar esta tecnología a otro nivel y fabricar una nueva generación de aplicaciones capaces de aprender por si mismas.
Para lograrlo, han puesto a disposición de los desarrolladores lo que han llamado Google Cloud Platform, una plataforma con diversos servicios que combinan lo mejor de la nube con el aprendizaje de máquina, ya sea en modelos para que los mismos programadores desarrollen el esquema de aprendizaje, o con modelos preentrenados para esta tarea. Lo interesante es lo que los desarrolladores puedan lograr con las herramientas que ofrece la plataforma de Computación en la nube -como Google Cloud Dataflow o Google Cloud Datalab– ahora que la compañía ha puesto a su disposición diversas APIs que pueden ser utilizadas en sus propias aplicaciones y lograr que sean cada vez más inteligentes.
No es la primera vez que se hace una movida de este estilo, pues Microsoft ya tiene un tiempo ofreciendo a su público desarrollador herramientas de machine learning a través de Microsoft Azure, y por otro lado, Amazon ha hecho lo propio con servicios web usando Amazon Web Services. Con esto, cada programador tiene un entorno para escoger, decidiendo de qué forma puede lograr que sus aplicaciones inteligentes sean competitivas en un panorama en el que los servicios en la nube con aprendizaje propio ya no forman parte de un universo de ciencia ficción, sino de ese mundo tangible y dinámico con el que estamos en contacto a diario.
Fuente: The Verge, TechCrunch
